Intervención de la Senadora Angélica de la Peña Gómez, del Grupo Parlamentario del PRD, durante conferencia de prensa de la Comisión de Derechos Humanos sobre bullying, maltrato y violencia contra niñas y niños.
Angélica de la Peña Gómez, (ADPG): Vamos a comenzar la conferencia de prensa de la Comisión de Derechos Humanos.
Vamos a tratar el tema de gran relevancia y preocupación en nuestro país que tiene que ver con el bullying, maltrato y violencia contra niñas y niños.
Vamos a entrar a tocar un tema, realmente que ha conmovido a la sociedad mexicana.
Por desgracia estamos entrando en nuestro país a sobrevivir cifras verdaderamente terribles en un tema que creíamos muy alejado de nuestro país.
En Europa en los años 70, 80, es un tema de real preocupación, por eso el bullying es una palabra que surge en Reino Unido y que por desgracia de nuestro país, según cifras de la organización, de la OCDE y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, CNDH, ponen a México como el país con más bullying, con más maltrato y abuso entre niñas y niños, es decir entre pares.
No tiene nada que ver con el otro asunto también de real preocupación de la violencia contra las niñas y los niños, que también se ha, por desgracia, permeado en la sociedad, en los medios de comunicación, y que va a la par de los distintos fenómenos que hemos conocido del bullying.
Todos, ambos casos, la violencia contra niñas y niños y adolescentes, el acoso entre niñas y niños que se conoce como bullying, la intimidación entre niñas y niños y adolescentes, preciso ente pares, son dos fenómenos de una preocupación que nos tiene que ocupar.
Y por lo tanto yo me acompaño el día de hoy por distintas organizaciones que comparten esa preocupación, se dedican a eso, desde las organizaciones no gubernamentales.
Y por supuesto queremos dejar claro varias cuestiones.
En primer lugar, el bullying es un asunto que el Senado de la República tiene pendiente legislar, tenemos cuando menos dos iniciativas, que tiene que discutirse ya en comisiones sobre elbullying.
Yo tengo la opinión personal de que además tiene que haber un capítulo específico en la Ley General de Educación, porque es un asunto que se padece en el ámbito educativo o que surge en el ámbito educativo, aunque muchos de estos fenómenos luego sigan permeando afuera de las escuelas.
Es decir la intimidación hacia niñas y niños a veces sigue dándose afuera de las escuelas.
Incluso cuando tienen relación entre el barrio, de niñas y niños que coinciden en las escuelas, siguen llevándose, sigue trascendiendo hacia los barrios.
Entonces, ése es un fenómeno, por lo tanto que tiene que ver con el ámbito educativo, pero no solamente, ahí se expresa.
Distinto científicos que se han dedicado al estudio del bullying nos señalan que lo que está detrás de la intimidación entre niñas y niños y adolescentes, tiene que ver con las violencias que se viven de distintas formas en sus familias.
Los niños y las niñas reproducen, se desquitan, llegan a las escuelas y siempre, así como ellos son objeto o ven en sus familias o son objeto de un predominio del más fuerte en su familia y que ejercen maltrato o violencia o acoso violento, eso mismo lo reproducen en la escuela.
Es el acoso contra las niñas, los niños, adolescentes o los que se encuentran menos empoderamos frente a tres o cuatro o cinco niños contra uno o una.
Entonces el problema tiene que resolverse, insisto, desde el Sistema Educativo Nacional, brevemente me parece que además de lo que han planteado las distintas iniciativas, tiene que aprenderse lo que están haciendo otros países, no inventar el hilo negro.
Y también establecer medidas de mediación, recursos de mediación entre las niñas y los niños y adolescentes para que entre ellos también empiecen a resolver.
Y tomando irrestrictamente el derecho de participación de las niñas y lo niños, necesitamos involucrarlos también en la resolución de sus propios conflictos, son las formas de mediación entre las niñas y los niños.
Y por supuesto, la actitud que tienen que tomar maestras y maestros, los directores y directoras de las escuelas, de los planteles educativos, tanto en el ámbito público de educación pública como la educación privada.
De tal manera que tengamos además de las familias este triangulo que permita tener una resolución integral al fenómeno del bullying.
No pude ser por lo tanto, una medida paliativa, es decir, no integral no que vaya al fondo, no puede ser una medida coyuntural, que porque está ahorita el tema, entonces ahorita hacer algo; no puede ser de ninguna manera un asunto que solamente competa a una autoridad o a un ente o a una institución.
Tienen que ser, insisto, vista con las niñas y los niños en las escuelas con las y los maestros, directores, directoras, con las familias y tiene que tender este fenómeno que además tienen una clara connotación social, también tienen una clara connotación de una atención psicológica.
Quienes sufren el bullying, según datos que tenemos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, de cada 6 1 se suicidad, entonces no estamos frente a un fenómeno menor en México.
Hace dos años el 30 por ciento de quienes fueron entrevistados, de las alumnas y los alumnos, mencionaban que habían sufrido alguna forma de bullying, hoy en la actualidad es casi el 50 por ciento.
O sea, se ve que en los dos, tres años, ha subido porque no ha habido acciones, entonces aquí hay que determinar acciones, insisto, integrales, profundas, que resuelvan el problema del acoso, de la intimidación entre las niñas y los niños, entre las adolescentes de ambos sexos.
Por supuesto hay una clara connotación de discriminación, en donde los que abusan siempre se van contra el que es diferente, contra la que es diferente porque trae lentes, porque es bajita, porque es alta, porque es flaquita, porque es gordo, porque es moreno, porque no tiene papá, porque no tienen mamá, porque X o Z razón, siempre.
Entonces ahí sigue perneando en nuestra sociedad, las formas de discriminación que se reflejan en la forma de actuar de las niñas y los niños, agreden al que es más pequeñito en el salón porque es más débil, más susceptible de llegar contra él. Siempre es así.
Entonces, necesitamos por lo tanto, y con esto termino para darle la voz a quienes me acompañan, después de que se los presente. Necesitamos, también además de desempolvar las iniciativas sobre bullying para discutirlas debidamente, también necesitamos desempolvar la Ley de Protección Integral de los Derechos Humanos de Niñas, Niños y Adolescentes, que garantice irrestrictamente todos sus derechos.
Todos sus derechos tomados en cuenta, insisto, holísticamente, uno con otro, con otro; todos son interdependientes, para que esta ley que crea el sistema del protección integral y garantía de los derechos de niña y niños y de adolescentes, pueda responder, insisto, también de manera integral.
Porque tampoco es responsabilidad sólo de Sedesol, también la Secretaría de Salud tiene que responder. Sedesol, SEP, la Secretaría de Economía, por supuesto la Secretaría de Hacienda.
SI ustedes vieran los datos que se invierten en las escuelas son mínimos, entonces todo eso son síntomas de debilidad del Estado frente a instituciones que por el contrario necesitamos fortalecer.
No es ver los asuntos como qué gastos, no, qué inversiones tenemos que impulsar.
Porque nuestras niñas y nuestros niños, nuestras nietas y nuestros nietos van a las escuelas y pueden ser objeto de estos fenómenos de cualquier forma de discriminación y a veces no nos damos cuenta.
O cuando tenemos una responsabilidad porque tenemos situaciones de violencia en nuestras familias, pues lo que estamos provocando es que estas niñas y estos niños vayan a las escuelas, o sean víctimas o sean victimarios.
Entonces me preocupa mucho también la criminalización de las personas menores de edad. Tienen que asumir, esos sí y lo quiero destacar con toda puntualidad, tienen que asumir responsabilidad de sus actos, no es perdonarles como si no hubieran hecho nada, pero tienen que tomarse en consideración la responsabilidad en función de la edad.
Cuando nosotros discutíamos, cuando reformamos el 18 constitucional para quitar ese sistema tutelar, que te acuerda Luisa, y para instaurar en la constitución un sistema de responsabilidad de adolescentes infractores, lo que estaban haciendo fuera en imputabilidad. No.
Los adolescentes tienen que asumir responsabilidad de lo que hacen, pero siempre tiene que haber proporcionalidad.
En este caso del bullying tiene que haber además una corresponsabilidad de todos los adultos y las adultas que llevan a las niñas y los niños a estar frente a esa situación, insisto, como victimarios o como víctimas.
Entonces, los temas son de preocupación, pero también de ocupación del Senado. Vamos ha hacer cosas que les voy a decir al final, por lo pronto… ¿o sí las adelantó de una vez?
Si, las voy a adelantar. Miren, vamos a hacer un conversatorio, vamos a convocar en 3 semanas más un conversatorio con niñas y niños, con adolescentes de ambos géneros, tanto mujeres y hombres y vamos a integrar mesas por edades para que sean las propias niñas y niños y las adolescentes los que discutan estos fenómenos y empiecen también a reflexionar y entonces concluyan qué es lo que tiene que hacerse desde el punto de vista de ellos.
Yo milito en eso, eh, en la protección, en la prevención, pero también en la participación.
Y los derechos de la participación de la Convención sobre Derechos de la Niñez en México no se aplican y tenemos que darles voz a las niñas y los niños también para que diriman desde sus propios espacios a partir de sus propias edades qué es lo que tienen que hacer a partir de una situación como la que hoy estamos padeciendo en México.
Y no nos enorgullece estar en primer lugar en el mundo occidental del padecimiento del bullying.
Entonces me acompañan Alma Meneses del REDIM que ustedes saben que esta Rey sobre los Derechos de la Infancia en México aglutina a más de 130, son 70 organizaciones en todo el país y tiene cercanía como con otras 50, pero integradas formalmente en la red son una gran cantidad, son 70 distinguidas con nombre y apellido a lo largo y ancho del país, con distintas especialidades.
Me acompañan también de ¿Quién habla por mí?, que es una organización sensacional que dirige María Ampudia y Areli Rojas y que tienen en si consejo como uno de los grandes promotores junto con otras personalidades muy importantes también, a Sergio Mayer, que lo saludo con gran afecto para que también les vamos a dar la voz de lo que ellos están haciendo, porque esa organización se dedica sobre todo a la protección de niñas y niños menores de seis años, que es la parte más vulnerable.
Si un niño, una niña en la escuela primaria o en la secundaria puede videograbar, puede decir, los niños de seis años no lo pueden hacer.
Porque además junto a este fenómeno del bullying, también tenemos el otro fenómeno que es el que van a desarrollar principalmente ¿Quién habla por mí?, que tiene que ver con el acoso, con la violencia, el acoso violento contra niñas y niños y que también se ha evidenciado en los medios de comunicación y que tiene como al gran héroe, permítanme que lo ponga así, a Owen.
Yo creo que Owen tiene que pasar a la historia, lástima que ya sabemos cómo se llama, ojalá que nunca nos lo presenten para conocerlo, sino que siempre se guarde su físico de manera anónima, pero sí sabemos ya cómo se llama, Owen.
Y Owen es un niño héroe al que le debemos en el Senado de la República y en el Congreso, un trabajo muy escrupuloso para dotar de las leyes que necesitamos para proteger a esas niñas y niños.
Entonces, María, te doy la palabra y luego seguimos.
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